El banco en el que Owen trabaja como gerente es escenario de un robo días antes de su boda. Y todas las pruebas apuntan a las personas menos pensadas: ¡sus futuros suegros!

Desde que ocurrió una tragedia personal hace cinco años, el locuaz y excéntrico Bell Prescott no ha dejado la laberíntica propiedad en el río Apalachicola que comparte con su madre.

Una chica con grandes activos roba dinero de la mafia. El hijo del jefe del crimen se lo toma como algo personal y busca ajustar cuentas. Mientras tanto, un hombre que busca esparcir las cenizas de su hermano se ve envuelto en el drama.